Las empresas de servicios logísticos ofrecen productos que a menudo pueden parecer más sencillos de lo que en realidad son. Es fácil hacerse una idea de cuáles pueden ser las diferencias entre un servicio exprés o urgente y una entrega en servicio económico. Sin embargo, ¿sabe el cliente siempre en qué se traducen exactamente estas diversas opciones?
La mejor forma de hacerlo es preguntar, así que os proponemos cuatro cuestiones que deberíais preguntares a las empresas de servicios logísticos.
Cuatro cosas que deberías preguntarles a las empresas de servicios logísticos
Plazos de entrega
Como decíamos, es intuitivo diferenciar entre urgente y no urgente. Sin embargo, resulta conveniente conocer qué acaban suponiendo ambos. En los envíos en la península, suele ser habitual que un servicio exprés se refiera a una entrega en 24 horas, mientras que un servicio más lento suponga 48 horas.
Pero existen otros factores, como por ejemplo el horario. No resulta lo mismo entregar una mercancía a las nueve de la mañana, a las cuatro de la tarde o a las 11 de la noche. Por ejemplo, nuestro servicio de paletería entiende que las entregas se realizan durante un horario comercial convencional completo, de forma que los horarios reducidos pueden suponer aumentar en 24 horas el tiempo de entrega. Del mismo modo, los horarios nocturnos o de madrugada pueden requerir servicios adicionales no contemplados en las entregas estándar.
Seguro en las empresas de servicios logísticos
Dice el refrán que solo nos acordamos de Santa Bárbara cuando truena. Y, en el caso de los seguros, no podría ser más cierto. Gracias a iniciativas como roturas cero, en nuestra red de PBX, registramos muy pocas incidencias al año. Pero más vale movernos por terreno conocido antes de que estas se presenten. En España el seguro básico marcado en la LOTT cubre una indemnización dependiendo del peso de la mercancía deteriorada, que está cerca de los seis euros por kilo (siempre que el valor de la mercancía no sea inferior).
Si quieres un seguro a todo riesgo será necesario que preguntas a tus empresas de servicios logísticos si disponen de esta posibilidad y cuál es el coste adicional. Tendrás que valorar cómo es tu mercancía (si es muy cara, si es frágil y por lo tanto propensa a roturas, etc.) para decidir qué tipo de cobertura se ajusta a tus necesidades.
Cubicaje
¿Qué pesa más, un kilo de paja o un kilo de hierro? En el transporte, un material más ligero y uno más pesado pueden llegar a cuantificar la misma cantidad de kilos. Es lo que se conoce como cubicaje, que no es otra cosa que una regla que se aplica a las mercancías más voluminosas para traducir su espacio ocupado a kilos. Se calculan los metros cúbicos del envío, multiplicando las tres dimensiones de cada uno de sus bultos y al resultado se le aplica un factor de conversión de una determinada cantidad de kilos por metro cúbico.
Así, una mercancía que ocupe medio metro cúbico a la que se le aplique un factor de 250 kg por metro cúbico se contabilizará como un peso de 125 kilos. Ten muy presente que el factor de cubicaje aplicado puede variar según el envío sea terrestre, marítimo o aéreo, lo cual puede terminar siendo una diferencia muy significativa en el precio final.
Mercancías excluidas
No todas las mercancías tienen la misma consideración para un seguro. De forma que algunas de ellas pueden suponer un mayor coste, requerir un seguro adicional o, directamente, estar excluidas del seguro. Entre la mercancía general, algunas de las mercancías que suelen quedar fuera de estas coberturas son los billetes, las pieles finas, el vidrio plano, equipajes, objetos de arte, etc. Asegúrate siempre de qué consideración tiene tu mercancía entre los seguros de tus empresas de servicios logísticos.
Consulta en el siguiente enlace los servicios logísticos de Transgesa.