La semana pasada el diario El País publicó un artículo en el que se preguntaba por el futuro y la viabilidad del transporte de mercancías en Madrid. Con el titular: “El efecto Amazon en Madrid: la ciudad se “colapsará” si no se cambia el modelo de reparto de paquetes”, el texto analizaba la problemática que se da en la actualidad y repasaba algunas de las soluciones que se están buscando desde la administración y desde las iniciativas privadas de los operadores logísticos y otras empresas.
El problema del transporte de mercancías en Madrid
El ecommerce lleva años creciendo a un ritmo de dobles dígitos. Nos acercamos al Black Friday, una fecha que hasta hace apenas unos años era desconocida en España y a la que ahora no hay empresa que no se apunte. Pero es que el calendario está trufado de eventos que disparan las ventas en los comercios electrónicos: día del Padre, de la Madre, San Valentín, Navidad, las diversas temporadas de rebajas, la vuelta al cole…
“Los repartos por ventas online saturarán de furgonetas y camiones el centro de Madrid si no cambia el modelo de distribución, ha advertido este jueves la patronal de empresas logísticas Centro Español de Logística (CEL). Las compras con entrega de paquete son ya el 30% del total de las transacciones por Internet en España, el doble que en 2015”, explica El País citando a CEL.
La tipología de estos envíos correspondientes al comercio electrónico es muy diferente a la de las entregas a empresas o en polígonos industriales, mucho más voluminosas. En los entornos urbanos son las furgonetas y los camiones de mejor tonelaje los protagonistas, lo que supone un mayor número de vehículos en las carreteras para mover menos kilos en cada carga. Además, las restricciones de horarios en los accesos también fomentan que se acumulen estos viajes en las mimas franjas horarias en lugar de tener una distribución a lo largo del día.
Una posible solución
La propuesta estrella que recoge el texto es la creación de microcentros de distribución dentro de las grandes ciudades. En vez del modelo más tradicional en el que se parte desde almacenes más alejados, se apuesta por lo almacenes ,más pequeños pero más próximos a los puntos de entrega. Esto lograría acortar kilómetros de recorrido y permitir a un mismo vehículo realizar más servicios por jornada.
Para que esta alternativa sea viable, a menudo también se tiene en cuenta que esos almacenes de proximidad puedan ser multi-empresa. Es decir, que diversos operadores logísticos compartan dichas instalaciones. Esto nace de la necesidad de optimizar el espacio, tanto por el mayor precio por metro de estos almacenes como por la dificultad de encontrar este tipo de espacios.
Es importante darse cuenta de que esta problemática no es exclusiva de Madrid. Otras grandes urbes comparten esta inquietud, y la noticia recoge las de la capital inglesa: “Las autoridades de Londres presentaron un gran plan en marzo con el fin de disminuir el tráfico de furgonetas y camiones en sus calles. En hora punta, estos vehículos suponen un tercio del tráfico en el centro de la capital británica y un quinto en toda la ciudad. El proyecto contempla una licitación para instalar casilleros en las estaciones del metro y la cesión de suelo público para crear centros de micro distribución”.
Consulta en el siguiente enlace los servicios logísticos de Transgesa.